Esta nueva normativa entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2021, derogando en ese momento al actual IFRS4. Se permite la adopción anticipada de la norma si se han aplicado tanto los NIIF 15 como los IFRS 9.
Diseñada para lograr el objetivo de una contabilidad consistente y basada en principios para los contratos de seguros, la IFRS17 exige que los pasivos se midan a un valor de cumplimiento actual y proporciona un enfoque de medición y presentación más uniforme para todos los contratos de seguros.
Contabilización de pasivos a valor corriente
Según explica la institución internacional, esta nueva norma ayudará a los inversores a entender mejor la exposición al riesgo de los aseguradores, su rentabilidad y su posición financiera. La IFRS 17 resuelve los problemas de comparación creados por la IFRS4 al exigir que todos los contratos de seguros sean contabilizados de manera consistente, “beneficiando tanto a los inversores como a las compañías de seguros”, se destaca. Así, los pasivos de seguros se contabilizarán utilizando valores corrientes, en lugar del coste histórico. La información se actualizará periódicamente, proporcionando información más útil a los usuarios de los estados financieros.
“La industria aseguradora juega un papel vital en la economía global. La información de alta calidad para los participantes del mercado sobre cómo las aseguradoras se desempeñan financieramente es por lo tanto extremadamente importante. Debido a la variedad de métodos contables utilizados actualmente, algunos países verán cambios más significativos que otros con la introducción de la nueva norma”, indica Hans Hoogervorst, presidente del IASB.